9 mar 2016

Pavlova

Una de las pavlovas más sencillas de hacer, con paciencia, claro... Este pastelito de merengue os dejara sin habla ya que se caracteriza por ser muy crujiente por fuera y tener un cremoso y ligero interior, además, la ventaja que tiene es que lo podéis decorar con cualquier fruta que os apetezca (en mi caso, arándanos).



Para el merengue:
- 2 claras de huevo
- 130g de azúcar
Precalentamos el horno a 90ºC. Batimos las claras a punto de nieve y vamos añadiendo el azúcar, sin dejar de batir, poco a poco. En una bandeja con papel de horno, ponemos los merengues, dándole la forma que queramos pero haciendo un pequeño hoyo en el centro de éstos. Horneamos durante una hora y media. Retiramos del horno y dejamos enfriar. Mientras tanto, vamos haciendo la crema del interior
Para la crema:
- 200ml de nata para montar
- 100g de azúcar
- 100ml de yogur natural
Montamos un poco la nata y añadimos poco a poco el azúcar, una vez este montado, añadimos el yogur y volvemos a batir.
Rellenamos los hoyitos de los merengues y hacemos dos capas, por último, coronamos la capa de arriba con la fruta o fruto que más os apetezca y ya podréis disfrutar de este maravilloso dulce... Espero que os haya gustado y como siempre, muchas gracias por leerme!! 

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